Ofrecemos las garantías de calidad de la carne de cordero criando razas cárnicas pesadas lanares similares a las de Nueva Zelanda, Uruguay, Argentina y Chile.
La edad de sacrificio de los animales no supera 1 año, logrando así un producto superior en cuanto a textura, propiedades nutricionales y versatilidad para preparar recetas, favoreciendo la biodiversidad y la economía rural.